LA COOPERATIVA DE CRÉDITO NECOCHEA

Hace ya casi cinco años Martín Migueles viajó  a España y tomó contacto con cooperativistas vascos que desarrollaron las cajas de crédito en ese país. Regresó tan entusiasmado con el proyecto que convocó a un grupo de amigos a diseñar algo parecido en nuestra ciudad. Así comenzó este grupo en reuniones en la Cámara Comercial y se fueron sumando adherentes.

Se realizó un estudio de factibilidad por parte del Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos que demostró que el proyecto era viable  y entonces se inició un largo proceso de visitas a instituciones, empresas y colegios profesionales con resultados muy diversos.

Alentados por el Banco Central se presentó el proyecto de una Caja de Crédito que por ley semejaba a un banco pero las autoridades nacionales dejaron de lado su apoyo a estos emprendimientos y ninguno fue aprobado. Se nos ofreció entonces la creación de una Cooperativa de Crédito dependiente del INAES y con atribuciones más limitadas que se basan en no poder ser intermediario de depósitos y de trabajar co capital propio.

Transcurrieron cuatro años de papelerío, viajes e interminables audiencias, mientras que todos los lunes el grupo continuaba reuniéndose con el objeto de consolidar la férrea voluntad de concretar esta aspiración.

La UPC construyó el local que es de su propiedad y que la cooperativa tiene en usufructo y en condición de aporte de capital instaló el mobiliario y todo el instrumental necesario para la operatoria. Conseguida la matrícula y la autorización para funcionar se solicitó de los posibles aportantes de fondos la concreción de los mismos en una cuenta del Banco Credicoop.

1750 personas había aportado $ 100 en diez cuotas mensuales y más de 100 instituciones, empresas y particulares hicieron importantes aportes de capital. Pero el capital recaudado fue menor del esperado al principio. Algunos, los menos, no cumplieron sus compromisos y los apoyos prometidos de parte de las autoridades nacionales y provinciales se desvanecieron influenciados por la crisis política que sufre nuestro distrito.

Hemos abierto nuestras puertas confiando en el futuro desarrollo del proyecto, con un  capital que nos obliga a ser muy prudentes en nuestra operatoria y trabajando a destajo en cerrar acuerdos para la emisión de una tarjeta de crédito propia y la comercialización de seguros que nos cubran los gastos operativos. Mientra tanto, de a poco, estamos dando créditos a personas que no tiene acceso al sistema bancario y acompañamos proyectos de micro emprendimientos para el desarrollo familiar.

Es reconfortante en recibir el agradecimiento de gente muy humilde que recurre a nosotros por apoyo y asesoramiento. Seguimos esperando mayores aportes para un proyecto que en el futuro puede ser muy importante basado en la premisa: “ capitales necochenses invertidos en nuestro distrito para propender al desarrollo regional “