Hace aproximadamente ocho años decidí mi retiro de la profesión de Farmacéutico que ejercí durante largos treinta y ocho. Un grupo de amigos me invitó a participar en un programa radial en base a mi experiencia política y administrativa. Así nació una nueva pasión que nos hace a los viejos rejuvenecer.
Siete años en radio en tres emisoras ( FM Voces, FM Spacio y FM Frecuencia Vital ) con tres distintas sociedades propietarias, un año en Canal 11 de televisión abierta y un año como columnista semanal de FM Urquiza de Buenos Aires, marcaron una actividad que me ha permitido conectarme con gente importante, aprender todos los días algo más y convertirme en una especie de consultor de las emisoras de la ciudad en temas económicos. Cerca de dos mil entrevistas personales marcan la humilde historia de esta labor.
Pasaron por mi programa, que siempre se llamó “Imagen y Hombres” con la música de fondo de ”Adiós Nonino” de Astor Piazola., políticos, economistas, productores, comerciantes, educadores, artistas y ciudadanos preocupados por el bien común. Con ellos acordé, disentí, critiqué, pero siempre tratando de mantener el respeto que se merece la opinión ajena. Muchos me apoyaron y los que no saben entender las diferencias de pensamiento en democracia me criticaron con dureza.
En mi paso por las tres radios mencionadas que cambiaron tres veces de lugar de emisión, formé parte del inventario y del mobiliario que fue cambiando de manos ya que siempre estuve sentado en la misma silla, a la misma mesa y frente al mismo micrófono.
Para desarrollar esta actividad hay que pagar por el espacio en el medio en el que se actúa lo que nos convierte en productores, vendedores y cobradores de la publicidad necesaria para cubrir los costos. Siempre he tenido un grupo de amigos que me sobrevaloran y que han hecho posible mi trabajo, a los que mi agradecimiento es enorme.
Insisto en que esta actividad me ha servido para informarme, cultivarme y relacionarme, pero he sido testigo de poco explicables cambios de opinión de personajes importantes que han privilegiado sus intereses personales a sus convicciones. Para un dinosaurio educado en la importancia de las ideas esto se convirtió en un trago difícil de digerir y todo indica que en los tiempos venideros va a ser todavía peor.
Hay otra tarea que me espera, dedicarme al crédito solidario en la cooperativa que estamos por poner en funcionamiento, por lo que he decidido dejar esta actividad agradeciendo las atenciones recibidas y pidiendo disculpas si he ofendido a alguien en todo este tiempo.
“Nunca digas nunca” dice la canción y este retiro puede no ser definitivo si algo cambia en el futuro.
